La Regla de la Ropa Interior para Niños - ¿Qué Es? ¿Cómo Explicárselo a un Niño?

Dentro de las normas de seguridad que se enseñan desde muy temprana edad, existe el concepto de la "regla de la ropa interior"(pants (ingl.) – calzoncillos, ropa interior) o "regla de la ropa íntima". Con la ayuda de esta comparación fácil de recordar, se les explica a los niños lo que deben saber sobre los límites personales, principalmente los límites físicos.

La Regla de la Ropa Interior para Niños - ¿Cómo Explicárselo?

La regla se puede explicar de la siguiente manera:

"P" - Privado significa que las partes íntimas del cuerpo te pertenecen solo a ti. Solo tus padres o un médico pueden tocarlas en ciertos casos excepcionales.

"A" - Siempre recuerda que tu cuerpo te pertenece - y nadie tiene derecho a hacer nada con él, especialmente sin tu consentimiento.

"N" - No significa "No". No hay otro significado para esta palabra. Si le dices no a alguien, y esa persona sigue intentando tocarte o violar tus límites, es una buena razón para contárselo a un adulto (padre o madre). ¡Decir "No" no es vergonzoso! ¡Decir "No" no es culpable!

"T" - Habla sobre secretos que te molestan - habla sobre todo (todos los secretos) que te incomoden. Si un adulto te dice: "Que sea nuestro pequeño secreto", eso es una razón para contarle inmediatamente a otros adultos (padres). Porque hay secretos buenos y malos, y cualquier cosa que nos haga sentir mal no vale la pena mantenerla en secreto.

"S" - Habla; alguien puede ayudarte - y alguien te ayudará. Si algo malo te sucede, compártelo con amigos, padres, profesores o el psicólogo de la escuela. Las personas que hacen daño a los niños y adolescentes siempre cuentan con el hecho de que ellos tienen miedo de compartir lo que sucedió con alguien debido a la culpa o la vergüenza. ¡Comparte!

¿A Qué Edad Deberías Introducir la Regla de la Ropa Interior?

No importa cuántos años tengas, cinco o dieciséis. Estas reglas son relevantes a cualquier edad. Pedir ayuda es importante. Nadie debería pasar por abuso o incluso intento de abuso en soledad. No es vergonzoso pedir ayuda. Si alguien ha cometido violencia contra ti, ¡no es tu culpa! Habla, pide ayuda - tienes derecho a hacerlo.